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November 8, 2016

The Avengers versus Count Nefaria - Jim Shooter & John Byrne

Some of the best Marvel villains have a unique elegance and a true majestic attitude. Some are even kings or rulers of nations, such as Dr. Doom; others are respected due to their leadership and vision, such as Magneto. Perhaps the allure of such characters is their disregard for the democratic process. They know they’re right, they have a clear mission and they have enough power and resources to win the battle. 

Etymologically, the term villain derives from villa, and therefore the original meaning of villain is peasant; exactly the opposite of a noble man. So a super-villain like Count Nefaria is practically an oxymoron: an enemy (villain) that comes from one of Europe’s most privileged royal families. But Luchino Nefaria is a fascinating character precisely because of that strong contradiction. A representative of Italy’s aristocracy, Nefaria shares a few similitudes with the Prince in “Il Gattopardo”; in this nostalgic novel, Giuseppe Tomasi di Lampedusa recreates the end of an era, the decline of royalty and the ascension of new social classes. 

I’ve been a huge fan of Count Nefaria for years. This tragic figure represents the end of royalty and the frustration of those who once had power and now have lost it. Furthermore, Nefaria’s impoverished situation is even more dramatic if we consider that he holds a nobility title, a document which is becoming more and more useless in today’s world. Count Nefaria is a man who owes money to his former colleagues, and those debts are the result of his failed plans to prevail against the superpower of democracy (namely, America’s superheroes).

In “To Fall by Treachery!” (originally published in The Avengers # 164, October 1977), Count Nefaria reunites the Lethal Legion (Living Laser, the first Power Man and Whirlwind), and persuades them to rob banks so that he can fund his projects. These 3 uncouth villains mock Nefaria as they see his old mansion dusty and practically abandoned. Indeed, the noble man can no longer afford a butler, not even a chauffeur (he explicitly complains about that while being forced to drive his own Rolls Royce).

Luckily for Nefaria, all his efforts seem to pay off in “Hammer of Vengeance!” (The Avengers # 165, November 1977). Project N is successful, and all of a sudden, Count Nefaria gains unlimited power. And then he attacks the Beast, Black Panther, Captain America, Scarlet Witch, Wasp, Wonder Man and Yellowjacket, defeating them with ease. John Byrne magnificently illustrates the fighting sequences between Earth’s mightiest heroes and the Italian count. 

Undoubtedly, my favorite scene takes place when Nefaria defeats the Whizzer. The old hero, however, gives him a fulminant warning: “How old… are you, Nefaria? Fifty? More? You’re past your prime! You’ve acquired your strength just in time to watch it fade with the dregs of your youth”. In the same way that aristocracy is at its death throes, Count Nefaria won’t have the chance to enjoy his powers for long. Shocked by the realization, Nefaria desperately vows to use all his abilities to discover the secrets of immortality.

In “Day of the Godslayer!”, (The Avengers # 166, December 1977), Count Nefaria goes even further, as he stands against the Invincible Iron Man and even the Mighty Thor. In fact, only the combined power of the Odinson and the Vision are able to stall him momentarily. During the fight, Nefaria has aged considerably. Wielding such formidable powers has taken a toll on him. 

Jim Shooter’s script is entertaining and full of interesting ideas. And as I’ve mentioned before, John Byrne’s art in these issues is absolutely delightful. Additionally, inker Pablo Marcos really enhances Byrne’s lines. The cover artist is the incomparable George Pérez, although he gets so many different inkers (John Tartaglione, Mike Esposito and Ernie Chan) that sometimes it becomes hard to appreciate his characteristic style. 
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Algunos de los mejores villanos de Marvel tienen una elegancia única y una actitud verdaderamente majestuosa. Algunos son incluso reyes o gobernantes de naciones, como el Dr. Doom; otros son respetados debido a su liderazgo y visión, como Magneto. Tal vez el atractivo de tales personajes es su desprecio por el proceso democrático. Ellos saben que tienen razón, tienen una misión clara y tienen suficiente poder y recursos para ganar la batalla.

Etimológicamente, el término villano deriva de villa, y por lo tanto el significado original de villano es campesino; Exactamente lo contrario de un hombre noble. Así que un supervillano como el Conde Nefaria es prácticamente un oxímoron: un enemigo (villano) que proviene de una de las familias reales más privilegiadas de Europa. Pero Luchino Nefaria es un personaje fascinante precisamente por esa fuerte contradicción. Representante de la aristocracia italiana, Nefaria comparte algunas similitudes con el príncipe de "Il Gattopardo"; en esa novela nostálgica, Giuseppe Tomasi di Lampedusa recrea el fin de una era, el declive de la realeza y la ascensión de nuevas clases sociales.

He sido un gran fan del Conde Nefaria durante años. Esta figura trágica representa el fin de la realeza y la frustración de aquellos que alguna vez tuvieron poder y ahora lo han perdido. Por otra parte, la situación empobrecida de Nefaria es aún más dramática si consideramos que tiene un título de nobleza, un documento que se vuelve cada vez más inútil en el mundo de hoy. El conde Nefaria es un hombre que debe dinero a sus antiguos colegas, y esas deudas son el resultado de sus planes fracasados para prevalecer contra la superpotencia de la democracia (a saber, los superhéroes de América).

El Conde Nefaria reúne a la Legión Letal (Living Laser, el primer Power Man y Whirlwind), y los persuade para que roben bancos y así poder financiar sus proyectos. Estos 3 malvados villanos se burlan de Nefaria al ver su vieja mansión polvorienta y prácticamente abandonada. De hecho, el noble ya no puede permitirse un mayordomo, ni siquiera un chofer (se queja explícitamente de eso mientras se ve obligado a conducir su propio Rolls Royce).

Por suerte para Nefaria, todos sus esfuerzos parecen rendir frutos en “Hammer of Vengeance!” (The Avengers # 165, noviembre de 1977). El proyecto N es exitoso y, repentinamente, el Conde Nefaria gana poder ilimitado. Y entonces ataca a Beast, Black Panther, Captain America, Scarlet Witch, Wasp, Wonder Man y a Yellowjacket, derrotándolos con facilidad. John Byrne ilustra magníficamente las secuencias de lucha entre los héroes más poderosos de la Tierra y el conde italiano.

Sin lugar a dudas, mi escena favorita tiene lugar cuando Nefaria derrota a Whizzer. El viejo héroe, sin embargo, le da una advertencia fulminante: “¿Qué edad tienes, Nefaria? ¿50? ¿Más? ¡Ya has perdido tu juventud! Has adquirido tu fuerza justo a tiempo para verla marchitarse mientras los años se siguen acumulando”. De la misma manera que la aristocracia está en su agonía, el Conde Nefaria no tendrá la oportunidad de disfrutar de sus poderes por mucho tiempo. Sorprendido por este descubrimiento, Nefaria se compromete desesperadamente a usar todas sus habilidades para descubrir los secretos de la inmortalidad.

En el “Día de los Dioses”, (The Avengers # 166, diciembre de 1977), el Conde Nefaria va aún más lejos, ya que se opone al invencible Iron Man e incluso al todopoderoso Thor. De hecho, sólo el poder combinado del hijo de Odín y de Vision logran detenerlo momentáneamente. Durante la pelea, Nefaria ha envejecido considerablemente. Poseer semejantes poderes tiene un alto precio. 

El guión de Jim Shooter es entretenido y lleno de ideas interesantes. Y como he mencionado antes, el arte de John Byrne en estos números es absolutamente encantador. Además, el entintador Pablo Marcos realza las líneas de Byrne. El artista de la portada es el incomparable George Pérez, aunque la diferencia entre los entintados (John Tartaglione, Mike Esposito y Ernie Chan) a veces dificulta la posibilidad de apreciar su estilo característico.